El Arte de Ajustar es práctica, práctica y más práctica. Para convertirse en un gran “ajustador” se requiere confianza y experiencia. Experiencia basada en diferentes tipos de formas corporales, incluidos hombres o mujeres, la variedad de habilidades del cliente, los tipos de lesiones y tiempos.
Debes poder VER lo que los estudiantes están haciendo mal antes de ajustarlos. Esto significa mantenerte al día con tu propia práctica, perfeccionar tu alineación y pasar tiempo mirando a los yoguis practicando o incluso ajustando una clase en la que otro maestro está enseñando.
.
Antes incluso de hablar de ajustar físicamente la postura de un alumno, es mejor hablar un poco sobre por qué razón deberíamos hacerlo. Si no ajustas las posturas de un alumno desde que notas que es principiante después le será más difícil hacer la postura en forma correcta, pues ya ha creado el “mal” hábito. Los estudiantes también pueden lastimarse a sí mismos si no hacen una postura correctamente.
Los primeros ajustes que debes intentar hacer son los generales para toda la clase, es decir, identificar los problemas en más de un alumno en la sala, pero ¿cómo hacerlo físicamente? No es posible lograrlo, ya que tienes una sala llena y no puedes ajustar a todos al mismo tiempo. Por esa razón, lo que primero que debes hacer es el ajuste en forma VERBAL. Puedes comenzar durante la alineación cuando los clientes apenas estén adoptando las posturas o quizás una vez que estén en ella, también comentarles algún problema de alineación que notes.
Un ejemplo de desalineaciones más comunes en Phalakasana – postura de la Plancha:
Puede corregir estas desalineaciones verbalmente. Diciendo:
Por Heather Anderson
Recuerda que si quieres profundizar en la práctica de ajustes o si eres profesor certificado y debes completar tus horas YACEP, en Hot Yoga Academy tenemos el curso: El Arte de Ajustar.